Esta pregunta es una de las dudas más comunes para los emprendedores que se disponen a abrir su primera oficina y ahora también, cada vez más para quienes quieren preparar un espacio en su propio domicilio para poder teletrabajar en unas condiciones adecuadas.
Para estos últimos muchas veces surge también la pregunta de cuánto del mobiliario del que ya disponen pueden aprovechar para crear su propia oficina. En este artículo de nuestro blog repasamos los elementos indispensables para cualquier oficina o despacho, con las mejores recomendaciones para elegir los modelos que mejor se adapten a tus necesidades.
El núcleo de tu confort
Junto con la mesa operativa, la silla de trabajo es el elemento central de cualquier oficina y uno cuya importancia no deberíamos pasar por alto. Mientras que las sillas con ruedas genéricas disponibles en cualquier superficie comercial son adecuadas por ejemplo, para estar un tiempo corto de 1 o 2 horas al día trabajando con el ordenador, no disponen de prestaciones, ergonomía y diseño óptimos cuando vamos a permanecer sentados durante toda una jornada de trabajo.
Una silla adaptada al uso que le vamos a dar en intensidad y duración es necesaria si queremos evitar lesiones de muñecas, hombros, codo, espalda y cuello. La ausencia de una postura correcta no sólo puede hacer que desarrollemos estas dolencias, sino que tiene un impacto negativo en nuestro rendimiento, ayudando a la aparición de la fatiga y la falta de concentración.
Para elegir nuestra silla de trabajo debemos buscar una cuyo diseño nos ayude a adquirir una postura adecuada. Para ello es importante que seleccionemos una silla con un respaldo ergonómico, que podemos encontrar en modelos como la silla de trabajo Trou, y mejor si este respaldo tiene elementos ajustables.
Para que adoptemos un ángulo correcto de hombro, codo y muñeca, un elemento indispensable de nuestra silla de trabajo son los reposabrazos, y mucho mejor si estos nos permiten ajustes como los de la silla de trabajo Luntu que nos permite ajustar la altura, profundidad y giro de acuerdo con nuestras necesidades.
El centro de tu oficina
Al igual que con las sillas, muchas veces se subestima la importancia de una mesa de trabajo adecuada y diseñada para un uso intensivo. La estabilidad y durabilidad de las mesas de uso profesional marcan la diferencia y son características que notaremos con el uso.
Para elegir adecuadamente una mesa de trabajo para nuestra oficina o despacho, debemos buscar un modelo que se adapte a nuestros requisitos. Modelos sencillos como la mesa operativa Eupor son ideales para tareas diversas e incluye también un faldón, lo que la hace una mesa excelente también para recibir a nuestros clientes.
Para aquellas personas que emplean una mayor cantidad de equipos electrónicos o informáticos, los modelos que disponen de pasacables y sistemas de gestión del cableado son la mejor opción. Gracias al diseño de estas mesas podremos mantener nuestro espacio de trabajo ordenado sin ninguna complicación. Modelos como la mesa operativa Careco o la mesa operativa Colpa nos ofrecen estas opciones.
Es importante seleccionar también correctamente el ancho de la mesa o incluso elegir un modelo en L. El ancho adecuado para nuestra mesa de trabajo va a depender de nuestras necesidades y del espacio del que disponemos, pero siempre recomendamos coger una mesa un poco más grande si el lugar nos lo permite, ya que una superficie más amplia creará una sensación menos abarrotada, creando una sensación más agradable, algo que se reflejará en nuestro rendimiento.
No descartes el almacenaje
Aunque en los primeros días de un negocio o cuando empezamos a trabajar desde casa puede no parecer necesario, enseguida necesitaremos espacio para guardar documentos o repuestos. Dejarlo encima de la mesa puede parecer muy útil, pero es más fácil que se llenen de polvo y al igual que en nuestra recomendación sobre el tamaño de la mesa, cuantas menos cosas que no estemos utilizando en ese momento tengamos sobre la mesa, tendremos una sensación mejor y eso se notará en nuestro trabajo.
El elemento más básico para el almacenamiento en una oficina sencilla son las cajoneras de oficina. Estos muebles de oficina nos ofrecen habitualmente la opción de tener un cajón-archivador si necesitamos guardar bastante documentación o formatos de tres cajones para material diverso. Las cajoneras son muy prácticas ya que nos ayudan a aprovechar el espacio bajo nuestra mesa sin que necesitemos ocupar más superficie de nuestra oficina con otro mueble.
No obstante si nuestras necesidades de almacenamiento son mayores, la mejor opción son los armarios de madera o los estantes de oficina. Los primeros nos ofrecen muchas posibilidades de configuración, una ventaja para encontrar el mueble que mejor se adapta a las necesidades de nuestro despacho. Los estantes por su parte nos dan una respuesta más convencional y versátil, que en el caso del teletrabajo podremos aprovechar también para guardar objetos domésticos.